Hay muchos motivos por los que enamorarse de Toledo. No solo se trata de sus pintorescos pueblos, o de la inmensa oferta de actividades que podréis realizar dentro de sus confines territoriales, es la majestuosidad de sus ciudades y la gran riqueza cultural de su patrimonio. Toda esta combinación da como resultado un reducto perdido al noreste de la región de Castilla La Mancha que conseguirá sorprenderos.
Muchos son los espacios que han apostado por los maravillosos entornos de esta región para emplazar sus instalaciones y aprovechar el encanto natural de algunos de sus rincones. Desde la Campana de Oropesa hasta La Mancha, todas sus comarcas dan refugio a un gran número de enclaves incomparables que desprenden un hechizo muy particular y consiguen encandilar a muchas de las parejas que, como vosotros, están organizando su esperado gran día.
Los complejos y los salones de boda más tradicionales se encuentran en municipios como el de Los Yébenes, Mora, Mascaraque, Sonsaca, Recas, Torrijos, Otero, Serranillos Playa, Cazalegas u Oropesa, puntos que se convierten en el mejor reflejo del atractivo histórico de esta demarcación. Por otro lado, junto al paso del río Tajo, pequeñas localidades como Las Herencias o ciudades de reconocido prestigio como Talavera de la Reina serán el lugar escogido por grandes fincas y distinguidos restaurantes para ubicarse y poder bañarse de la belleza de sus paisajes.
Si sois amantes de la exclusividad y siempre habéis soñado con un enlace marcado por la elegancia, la capital alberga en su interior hoteles y haciendas llenas de lujos que, además, pondrán la guinda a su oferta regalando unas increíbles vistas a lugares tan míticos como la Santa Iglesia Catedral Primada de Toledo o el Parque de Las Tres Culturas.