La extensa llanura, los edificios arquitectónicos de gran belleza y los pueblos llenos de encanto dominan este territorio de Castilla La Mancha. Si todavía no habéis elegido dónde hacer las fotografías de boda o las sesiones preboda y postboda, os facilitamos una selección con los mejores lugares de la provincia de Toledo para que cojáis inspiración.
Cuidados jardines; antiguos conventos, iglesias y sinagogas; edificaciones majestuosas; cuestas empedradas; restos romanos… El atractivo de Toledo capital es innegable. Si sois amantes de las fotos de aspecto señorial, podéis realizar el reportaje en la Catedral de Santa María del Valle, en el monasterio de San Juan de Los Reyes, en El Alcázar, en los puentes de Alcántara y de San Martín, y delante o dentro de la Puerta de Bisagra. Por otro lado, las callejuelas y los cobertizos del casco histórico darán a la sesión un aire más romántico, especialmente si esta tiene lugar al caer la noche. En el caso que prefiráis un entorno más natural, nada mejor que pasear por la senda del Tajo, y si os gusta más una panorámica con la ciudad de fondo, podéis subir hasta lo más alto del Mirador del Valle.
Fuera de los límites de la capital, entre olivares y viñedos, se levantan pueblos con un encanto muy especial. En Consuegra el fotógrafo podrá captar vuestra esencia rodeados de molinos de viento, mientras que en Tembleque lo podrá hacer en la Plaza Mayor, que cuenta con una estructura que se asemeja a los antiguos corrales de comedia. Los municipios de Oropesa, Escalona, El Toboso, Guadamur y Maqueda son otras de las paradas obligatorias gracias a su impresionante patrimonio arquitectónico.
En el caso de querer plasmar la belleza de los entornos naturales manchegos más verdes, rojizos y azules, la encontraréis en el Parque Nacional de Cabañeros y en las Barrancas de Burujón.