Grandes fortificaciones medievales árabes y una ciudad antigua amurallada como capital son la seña de identidad de la provincia de Toledo. Recurrente entre las parejas que buscan celebrar una boda clásica y con mucha historia, este lugar se alza como una auténtica joya dentro de la geografía española que no pasa para nadie inadvertida. No solo la fama de los conocidos doce molinos de viento que recrean la batalla de Don Quijote contra los gigantes en Consuegra serán un reclamo, adentraos en sus rincones más desconocidos y descubrid todo un mundo de atractivos que harán imposible que penséis en otro lugar para albergar vuestra celebración.
En consonancia con el estilo señorial de todos sus levantamientos, las fincas que se divisan a lo largo de todo su territorio tienen una marcada esencia castiza. Grandes llanuras de extensión, con imponentes edificaciones presidiendo la explanada, se convertirán en un escenario de ensueño para vuestro Sí, quiero. Con localidades como Las Ventas de Retamosa y Villa del Prado al norte, y municipios como Cuerva, Sonseca, Mora y Turleque al sur, esta región se caracteriza por sus zonas montañosas y sus áridos paisajes.
A pesar de ello, si os decantáis por un entorno más urbano para vuestro gran día, ciudades como Talavera de la Reina o la propia capital que da nombre a la provincia pueden convertirse en el lugar que estabais buscando. Sin dejar de lado su vertiente más tradicional, ambas son poblaciones de grandes dimensiones y con mucho por ofrecer que, sin duda, conseguirán cautivaros con sus particulares encantos.