Si os llama lo clásico y lo tradicional y queréis celebrar una boda en un ambiente acogedor, con todas las comodidades a vuestra disposición y sin renunciar a la elegancia y la calidad, lo que estáis buscando es un cortijo. En la provincia de Sevilla, repartidos en las localidades más próximas a su capital, encontraréis un sinfín de opciones que os enamorarán tanto por sus cuidadas instalaciones como por todas las posibilidades que tendréis a vuestro alcance para dar forma a una boda de ensueño.
Los cortijos son las construcciones más comunes del territorio andaluz. Ocupan grandes extensiones alejadas de los núcleos urbanos, brindando una experiencia exclusiva a las parejas y a sus invitados. Son ideales para albergar grandes celebraciones tanto por sus típicos patios interiores como por las amplias zonas ajardinadas de sus exteriores, donde podrá tener lugar cada momento especial del evento. Los espacios interiores desprenden la auténtica esencia del sur en cada una de sus estancias, brindando la posibilidad de contar con alojamiento para la total comodidad de sus clientes.
Dos Hermanas, Alcalá de Guadaira, Pilas, Coria del Río o La Rinconada son algunas de las localidades en las que destacan estos complejos. Sus comarcas están bañadas por el Guadalquivir y se caracterizan por la llanura de su paisaje; una tierra donde la mezcla de culturas a lo largo del tiempo ha dejado huella en el entorno y en su esencia. En estos clásicos e inconfundibles cortijos disfrutaréis de total privacidad, de un clima incomparable y de una boda totalmente exclusiva a escasos kilómetros de la preciosa ciudad de Sevilla.