Nos casamos en julio en el Palacio del Negralejo y fue espectacular. El sitio es maravilloso, un lugar único con muchísimo encanto y personalidad. Estaba todo verde precioso. Todos los puestos de comida, las mesas de coctel, de cena... Todo decorado increíble. La comida un 10, buena calidad y riquísimo todo. La cena increíble. Todo el mundo se acercó a comentar lo buenísimo que estaba todo. El servicio de los camareros muy profesional y atento. La fiesta fue alucinante, un sonido y unas luces brutales. Solo tengo buenas palabras. Lo recomendaría sin duda 100%. Y, por supuesto, comentar la ayuda que recibimos para organizar todo, consejos, proveedores, máxima atención. ¡Un 10!

Nos casamos hace poco más de un mes (16 de septiembre) en Palacio de Negralejo y la experiencia ha sido espectacular. Estamos absolutamente felices con cómo salió todo, un 10. ¡Solo tenemos palabras de agradecimiento! La finca es preciosa, está bien cuidada y tiene mucha variedad de espacios donde elegir con muchísimo encanto natural. Nosotros celebramos la ceremonia directamente en la finca, en el Patio de Boxes. Es un espacio perfecto para ceremonias (y diría que para cualquier celebración o evento), ya que es al aire libre, tiene árboles por todos lados, y es un espacio recogido muy acogedor. El cóctel fue en el Jardín de Rosaleda y la comida en Rosaleda (una maravilla ya que, a pesar de ser un sitio de interior, se puede abrir todo el lateral y todo el techo, por lo que daba la sensación de estar al aire libre). Era una boda grande y estos espacios están plenamente capacitados para mucha gente. El cóctel muy variado, cuantioso y muy rico, y la comida perfecta de tiempos y realmente rica. Nos decantamos por una vichissoyse, cochinillo y tarta árabe. Riquísimo! Destacaría la atención del equipo Comercial (Virginia y María) que ha estado siempre a nuestra disposición, ayudándonos a organizar la boda, decidir los espacios, la decoración, etc. Asimismo, es una finca en la que puedes celebrar todo al aire libre, pero siempre tienen un plan B (bajo techo) en caso de que llueva. Al final tuvimos suerte y tuvimos un día nublado sin lluvia, por lo que hicimos la ceremonia, el aperitivo y la fiesta al aire libre. Dicho lo cual, estábamos tranquilos porque teníamos siempre un plan alternativo en caso de lluvia (sin necesidad de alquilar carpas ni gastarnos más dinero)

Desde el primer día que visitamos la Finca, supimos que era el lugar. Por una circunstancia laboral tuvimos que aplazar un año la fecha y lo autorizaron sin problema. Nos ayudaron mucho durante la preparación, haciendo que todo el proceso fuera muy fácil y nos dejamos aconsejar con sus proveedores y fue un acierto. Para el remate final, Pilar, la comercial con la que preparamos la boda y coordinó todo el dia B, fue maravillosa. Nos lo hizo todo fácil y nos consejo para que todo saliera perfecto. El cóctel, la música, la cena y el baile, salieron mejor incluso de lo pensado. Muchas gracias al Palacio del Negralejo y en especial, a Pilar, por hacer de nuestro día uno inmejorable.

Nos atendió Arantxa, se han portado fenomenal y nos han ayudado en todo lo que hemos necesitado, el sitio es precioso y nuestros invitados han estado encantados al igual que nosotros.

El Negralejo tiene servicio de weding planner incluido para el día de la boda, lo que ayuda a despreocuparse bastante en ese día. Al principio no nos convenció que hubiese que coger el catering de ellos así como el dj y el fotógrafo, pero no pudimos acabar más contentos. El catering de 10, además el defe de cocina es nutricionista y nos ayudó mucho con una persona diabética que venía a la boda, tema de alérgenos súper controlado. El dj fue muy bueno y los fotógrafos que elegimos (dentro del listado que te dan) fueron sin duda maravillosos. Elegimos el espacio de boxes y para nosotros fue maravilloso, tiene un encanto especial, gracias a todo el equipo que trabaja allí porque fue maravilloso.

Todo genial. Arantxa estuvo con nosotros a todas horas y entre la demora a causa de la madrina y de cuidar a uno de mis invitados (porque él no pudo disfrutar del cóctel, así que le acercaron un plato con bocadillos variados antes de que se fuera, me pareció un detallazo), no podría quejarme de nada, impecable el trato del maître y la manera de mimar de los camareros a los niños (ej.: hacerles repetir postre si querían). La comida riquísima según los invitados y volvería a repetir con ellos si se diera la oportunidad. Gracias, hicieron el día inolvidable para todos.

Palacio del negralejo fue un acierto.
El sitio es precioso, todo con mucha personalidad y rodeado de árboles.
Tienes muchas opciones para posibles planes b, que yo nunca pensé que fuéramos a necesitarlo y al final nos salvo la vida porque cambio el tiempo y llovió. El equipo de palacio negralejo reaccionó súper rápido. Empezó a llover 30 minutos antes de que llegaran los invitados y pudieron salvar la situación a la perfección. El coctel fue genial, estaba todo muy bueno y bien presentado. Mis Invitados estaban encantados. No querían ni pasar a la cena. Luego en la cena todo puesto precioso y la cena riquísima. La gente se asombró de que el solomillo estuviese riquísimo, caliente y de que no les falto vino ni agua en ningún momento. Que normalmente en otros sitios eso suele ser un fastidio.
Y el baile ya fue la guinda. La barra libre fenomenal todos atendidos sin colas, la fiesta con un despliegue de Luces chulisimo y la recena riquisima! Las hamburguesitas están increíbles. Y el córner de arroz que pusimos un éxito.
Recomendaría sin duda este sitio a todo el mundo.
Gracias al equipo por todo el currazo.

Una boda de ensueño. Tras varios cambios por temas de pandemia fueron muy profesionales y humanos. ¡La comida y las instalaciones de 10! La única pega, el cambio de asesoras en varias ocasiones, aunque fueron todas muy buenas.

Nos casamos en el Palacio el 12 de febrero, y no tengo palabras para describir lo perfecto que salió todo. En primer lugar, dar las gracias a Angie por ayudarnos tanto y estar con nosotros en todo momento, ha sido una asesora maravillosa. No puedo decir que ha sido lo mejor de nuestra boda porque todo ha sido increíble: desde el cóctel hasta la barra libre, todo el mundo nos ha felicitado por el sitio escogido, lo buenísima que estaba la comida y la amabilidad de los camareros, mención especial a Óscar, que fue nuestro maître, y que es un increíble profesional y una persona magnífica. Solo puedo dar las gracias a todas las personas que componen el equipo del Palacio del Negralejo por hacer de nuestra boda un día tan espectacular mucho más de lo que habíamos imaginado. Gracias por todo.

Voy a contar mi historia con la mayor sinceridad e intentar ser lo más objetiva posible. Me casé en Madrid el 18/09/2021 y celebré el banquete en esta finca.
En un primer momento, aunque la finca me gustó mucho, hubo algo con el trato (me he dedicado a atención al cliente muchos años) que me chirrió. Aun así, y pese a no convencerme al 100% el espacio que me ofrecían (a mi pareja sí), decidí aceptar. No es que el espacio no fuera bonito, pero estaba preocupada por el tamaño y el número de invitados. Esa sensación estuvo conmigo todo el tiempo. Me llamaba la atención que siempre fuera yo en todo momento quien contactara con ellos para preguntar, en vez de darnos guías o indicaciones de los pasos a seguir. Esto a una novia que está organizando su boda le genera inseguridad. La iniciativa de las reuniones era siempre nuestra, y a veces a regañadientes, diciendo que tenían bodas más cerca que tenían que atender antes que la nuestra (muy poca empatía, y se le puede decir al cliente de otra forma); así me pasó que, a pocos meses de la boda y contactando nosotros primero, les comentamos de nuevo nuestra preocupación por el aforo, pues el espacio era para 180 invitados y esos son los que teníamos en la lista (aunque finalmente disminuyó). Su respuesta fue que el aforo es del 50% para interior (no había exterior para celebrar el banquete y era obligatoriamente interior, algo que no me gustó desde el principio), lo cual me generó mucha ansiedad, pues estábamos a dos meses de la boda y creía que no me iba a poder casar así. ¡Cómo decía ahora a los invitados que no podían venir! Finalmente, nos cambiaron de espacio tras decirles en la reunión, la cual me costó otro esfuerzo conseguirla, que no me iba a casar. Casualmente, un espacio se había quedado libre y fue finalmente en el que lo celebramos. Obviamente, las condiciones no nos las cambiaron, lo cual por su trayectoria y poca delicadeza en el trato al cliente me extraño, fue la primera sorpresa agradable. Durante todo este proceso me di cuenta de que no iba a tener ningún detalle con nosotros. No están obligados, pero yo estaba en un grupo de WhatsApp con novias de toda España que se casaban en septiembre y ponían constantemente: la finca nos regala esto, nos ayuda con lo otro, aquí te cobran hasta el proyector, que eran 160€ sin IVA, ¡ojo! En fin, y llegó el día de la boda. Lo pasamos muy bien y estuvieron atentos. Ese día no estás para pensar en nada, y no te queda otra que confiar en la organización y los proveedores. Todo pareció ir bien hasta que, tras la resaca de la boda e ir a recoger las cosas que allí habíamos dejado el domingo, hubo algunas de ellas que no estaban. Durante los días posteriores nos fuimos enterando, además, de alguna problemática que nuestros invitados habían tenido durante la barra libre. Resulta que a partir de la 1:30 am comenzaron a decir los camareros que no quedaba ron. La barra libre comenzó en torno a las 11:30; además, se quejaron de que no servían o tardaban tiempos impresentables (más de media hora) en servirla. Todo esto nos ponía la cara colorada con nuestros invitados, nos dimos cuenta de que hubo cosas dentro del contrato que no se sacaron (chocolate con frutas). En fin, pero no contentos con ello, intentamos ir por las buenas y se lo comentamos, dijeron que lo hablarían con los encargados, y tras volver a preguntarles nosotros, tuvieron la cara de decir que: las cosas que faltaban las habían robado nuestros invitados (de vergüenza); qué hubo ron toda la noche (¡cuando al propio novio se lo dijeron!), un despropósito; y que en todo momento hubo lo que estaba en el contrato, ¡simplemente porque venía en la hoja de servicio! ¡Todas estas cosas pusieron la guinda para no recomendar el sitio! Una pena, porque es bonito y lo pasamos muy bien, pero el trato, la atención al cliente y el cuidado brilla por su ausencia. No nos ha quedado más remedio que ante la falta de medidas por su parte poner unas cuentas hojas de reclamaciones que espero lleguen a buen puerto.

Después de haberme casado allí, puedo hablar de todas las cosas que salieron mal, que da para escribir un libro, pero en especial quiero hacer hincapié en el tema de las alergias. Por favor, ni se os ocurra organizar aquí vuestra boda si contáis con alérgicos/intolerantes entre vuestros invitados. A los celíacos les pusieron milhojas de hojaldre, ¡a 4 celíacos que había! Por lo que el error no es a una sola persona. A un alérgico al marisco le pusieron txangurro (cangrejo), y así continuamos.

En cuanto a la respuesta a un comentario que os pone mi cuñada un poco más abajo, os confundís con otra celíaca que había en la boda. A mi cuñada le servisteis de primero la milhojas con hojaldre (no apta para celíacos), se lo cambiasteis por merluza, y de segundo le ofrecisteis solomillo, pero la volvieron a traer merluza. Total, un auténtico descontrol. ¿Qué decir de la merluza de la boda? Insípida y hasta hubo a gente que se le puso congelada. Ni siquiera en la mesa presidencial tuvo buena aceptación, ya que mi madre tuvo que pedir sal, en un hospital te la preparan mejor.

Seguimos con nuestros platos, los principales del menú. El sabor no era el mismo ni del primero ni del segundo, pero a 1 año vista, como bien dice la directora, puede que se nos haya olvidado, lo que sí que no tiene cabida, es que la presentación cambie de la prueba a la boda. No es lo mismo, y por lo tanto el sabor cambia, mezclar la patata con cordero en un timbal, que ponerlo por separado.

Durante el convite, algún camarero estuvo comentando con mis invitados lo poco que le pagaban, ¿es esto de recibo? Continuamos a la barra libre, donde se quedaron dos veces sin hielos y no servían agua (ni siquiera al novio).

Y, para terminar, mi ramo desapareció a la mañana siguiente de donde me dijo el metre que lo guardase.

Dejando de lado más comentarios negativos que sucedieron durante la ceremonia, como que mientras el cura estaba diciendo los votos, que se oían de otro espacio los gritos y la música… Espero, de verdad, que nadie elija a esta finca para celebrar su boda si no quiere que se le quede un sabor amargo.

Celebramos nuestra boda en el Palacio del Negralejo el 26 de junio de 2021. Ya conocíamos el lugar desde hace muchos años, y habíamos ido a algunas bodas allí. Además de ser un lugar precioso, está genial ubicado. Pero lo mejor es el trato que te dan. Nuestras asesoras fueron maravillosas, explicándonos todo y atendiendo a todas nuestras dudas. Fue una época difícil porque las restricciones de Covid cambiaban cada semana, así que confieso que llamábamos casi a diario, para informarnos de cómo iba evolucionando el tema. Y aun así siempre fueron amables y cooperativos. La cena fue un lujo, riquísimo. Por último, no es una queja, es un consejo por si alguien va a celebrar su boda allí, la música de la cena no la escuchamos; los altavoces estaban en un extremo de la sala (nos casamos en boxes), y los que estaban al lado se quejaban porque no podían hablar de lo alto que estaba, pero el resto de la gente, como nosotros que estábamos en el medio del salón, no escuchamos la música durante la cena. Por lo que os aconsejo que les pidáis que coloquen los altavoces repartidos por el salón. Por lo general fue todo maravilloso, si tuviera que volver a elegir un lugar para mi boda, desde luego que sería el Palacio del Negralejo. ¡Gracias!

Solo puedo decir cosas positivas sobre nuestra experiencia con el Palacio del Negralejo. Todo contribuyó a que el día de nuestra boda todo saliese perfecto y tengamos un recuerdo inmejorable de ese día. Destacaría varios puntos. Lugar/espacio: el palacio es precioso y los espacios que tienen disponibles tienen mucho encanto natural, sin necesidad de adornos o carpas. Incluso tienes la opción de casarte allí (nosotros lo hicimos y fue una de las mejores decisiones que tomamos). Y todo a solo 15 minutos de Madrid. Comida: excelente. Nos preocupaba poner solomillo por lo complicado que es hacer 250 al mismo tiempo y que no estén pasados, fríos, etc. Nada como darse un paseo por las mesas y ver que todo el mundo se lo había terminado para saber que la elección fue un éxito. Mención especial también a la tarta árabe y al cóctel, lleno de posibilidades y donde fueron muy flexibles con lo que le pedimos (por ejemplo: traer a una pulpeira). Servicio: durante la boda todo fue perfecto y en las semanas previas de preparación nos sentimos perfectamente atendidos y entendidos. Incluso la misma semana de la boda nos dejaron hacer algún que otro cambio importante. En resumen: un día inolvidable, una experiencia inmejorable y un lugar 100% recomendable.

Buen servicio en tiempos de pandemia, flexibles (hasta cierto punto...) y atentos, aunque con puntos por mejorar (cobro muy elevado por extras, mala colocación de sombrillas...).

Comida espectacular en calidad y abundancia. El cóctel tiene muchísima variedad y todo de excelente calidad... Variedad de córners muy buena, recomiendo especialmente el buffet de quesos. Cogimos el cóctel reforzado y Nuestros invitados llegaron sin hambre a la comida. Elegimos la merluza que era espectacular de primero, solomillo de cebón de segundo y las milhojas de postre. La recena abundante y rica. En la barra libre buenas marcas y gran variedad. El vino tinto muy bueno (viña real reserva) tienen varias opciones de vinos, con coste adicional, pero poder elegir es muy interesante. Si eres cervecero, la marca de barril es heineken y hay opción de corner de botellines de Mahou que cogimos. Pasamos un día excelente y salió todo perfecto. Gracias a la coordinación de todos los equipos. Sin embargo, echamos en falta más variedad de opciones a la hora de personalizar el salón (aunque tuviesen coste). Marta, Leticia y Angela estuvieron soberbias, atendiendo a todas nuestras necesidades. Con el grupo de coordinadoras que tienen pueden dar un servicio excelente como wedding planners exprimiendo la personalización. Gran variedad de manteleria. Cuberteria sin opción de personalizar. Minutas, protocolo que ofrece la finca es demasiado básico. Centros de flores incluidos en precio muy básicos. Decoración incluida en los salones para la boda escueta. Los centros florales incluidos en el precio son muy básicos. El metre Carrasco durante la boda estuvo perfecto, controlando tiempos y pendiente de todas las peticiones. En definitiva, ¡muchas gracias por todo! Fue un día espectacular gracias al empeño de todas las partes. Sin embargo, creo que aun pueden exprimir más el sitio y ubicación para potenciar su excelente comida. Los detalles son los que pueden hacer que cambie la percepción de un día tan especial como es una boda, una buena comida no basta. Toda la decoración que se ven en las fotos (centros, luces) no están incluidos, los pusimos con proveedores externos.