La comunidad foral de Navarra destaca por estar repleta de maravillas naturales llenas de contrastes y pueblos de cuento. Un sinfín de paisajes que pueden convertirse en el escenario ideal para realizar vuestro reportaje de boda soñado o cualquier sesión fotográfica de pareja.
La ciudad de Pamplona ofrece a las parejas todo tipo de calles, rincones, edificios emblemáticos y bares con encanto para tomar fotos de estilo urbano. Pero si lo vuestro son los entornos más señoriales e históricos, el castillo de Olite, la fortificación medieval de Artajona, el castillo de Javier y el Monasterio de Leyre serán vuestros emplazamientos imprescindibles. Por contra, si lo que preferís es un lugar más romántico y tradicional, los pueblos de Ujué, con sus casas de piedra de épocas pasadas, y de Lesaka, con sus canales y sus construcciones con estructura típica navarresa, os darán esas imágenes tan especiales.
En el caso que os sintáis más identificados con los parajes rodeados de naturaleza, os costará quedaros con un solo lugar. En Las Bardenas Reales el fotógrafo podrá retrataros en un marco totalmente desértico, mientras que en Las Cuevas de Zugarramurdi, en el Nacedero del Urederra, en el Bosque Encantado de Urbasa, en el embalse de Leurtza, en la Selva de Irati y en las Foces de Lumbier y Arbayún los auténticos protagonistas serán los árboles, las montañas, los valles, las cascadas y las aguas azules. Rincones donde la belleza os atrapará desde el primer minuto.
Otra opción, especialmente recomendada para los peregrinos, es sacaros algunas fotos en las diferentes etapas del Camino de Santiago. Anotad estas paradas: las localidades de Viana, Puente La Reina y Roncesvalles, y el mirador del Alto del Perdón. Y si preferís los espacios más rurales, podéis recurrir a los campos de cereal y los viñedos de la región.