Desde la Sierra de Cádiz hasta su bahía, esta provincia cuenta con lo mejor de las dos vertientes para camelar a todo aquel que la visita. Albergando en su interior posibilidades infinitas, se trata de una de las provincias andaluzas más completas. La tranquilidad del norte contrasta con la frenética actividad del sur, ofreciendo la posibilidad a todas las parejas de decantarse por el ambiente que mejor encaje con su evento en cada ocasión.
Si municipios como el de Arcos de la Frontera y la Barca de la Florida muestran todo el encanto del interior gaditano, es su costa la que concentra gran parte de la oferta entre la que podréis escoger para el día de vuestra boda. Un sinfín de salones se reparten a lo largo de su litoral, desde el Puerto de Santa María hasta Conil de la Frontera, albergando grandes espacios de boda que os enamorarán a primera vista con su encanto.
El blanco característico de sus fachadas, emulando los típicos pueblos de la zona, son parte de la seña de identidad de estos enclaves, emplazados a orillas de las increíbles playas que bañan sus localidades. Es así como El Puerto Real, San Fernando, Chiclana de la Frontera o el Poblado de Sancti Petri os regalarán algunos lugares de ensueño en mitad de sus idílicos paisajes.
A caballo entre estas dos realidades encontraréis Jerez de la Frontera. A pesar de no colindar con el Atlántico, esta ciudad absorbe todo su encanto y lo mezcla con el tradicional sabor andaluz para dar como resultado una población llena de encanto con mucho por ofrecer para vuestro gran día.