Las fotos de la boda son un recuerdo para toda la vida. Por ello, es de vital importancia que para la ocasión escojáis una serie de lugares que sean bellos, atractivos y memorables. Si todavía no sabéis cuáles serán los vuestros, estos parajes de la provincia de Albacete os pueden servir de referencia.
La ciudad de Albacete esconde preciosos monumentos y esquinas que pueden ser el marco perfecto para vuestras fotos nupciales. Los parques de Abelardo Sánchez y de Los Jardinillos combinan una extensa vegetación con fuentes, estanques y esculturas, dos imprescindibles para los amantes de la naturaleza. Por contra, si preferís un reportaje con un toque más urbano, podéis haceros las fotos entre el gentío de la calle Mayor y la calle Concepción o en las escalinatas de la antigua fábrica de harinas. Por último, aquellos que buscan una localización sumamente especial y diferente encontrarán en el pasaje de Lodares, una galería comercial modernista con una grieta de luz espectacular, su mejor opción.
Si queréis alejaros de la urbe, la provincia de Albacete también cuenta con lugares muy interesantes. Si queréis conseguir bonitas postales de montaña solo tenéis que ir hasta Ayna, localidad conocida como la Suiza manchega por los formidables valles que la rodean, o Riópar, donde se encuentra el nacimiento del río Mundo. Otras alternativas igual de fascinantes son Alcalá de Júcar, donde podréis fotografiaros con los atuendos nupciales junto a su famoso castillo o sus casas de cal excavadas en la propia montaña; y Chinchilla de Montearagón, La Roda y Almansa, con un patrimonio arquitectónico tradicional manchego digno de admirar.
También encontraréis meandros, llanuras y campos en los que tumbaros y dejar que el fotógrafo capte vuestra esencia rodeados de naturaleza, sonidos de pájaros y un atardecer de película. Lugares realmente asombrosos en los que idear un álbum de boda de ensueño.